Mi corazón.

<<Somos fácilmente engañados por aquellos a quienes amamos>>

Molière

Tu boca de aguijones lo envenenó una vez,
más no lo quieras.
Tu mentira le pintó unas ojeras
al que, cansado de latir
no reconoce que aún te espera.
Este engaño
es el ensueño
que tu alma me enseñó
y no hizo, sino más pequeño
el paraíso que me vendió.

[Un paraíso donde algo te llevará conmigo, entre las raíces de los árboles y las aguas subterráneas, donde nacen las hadas y los gnomos, donde las luciérnagas viven encerradas en estalactitas de cristal.
Y quedará solo una huella en la tierra que dejamos de alguna pena, que punzante, abrió un suelo sediento y nos llevó lejos de la vida que conocemos.]

.Escapar.

Tu indiferencia es ahora su ahogo
un ladrido constante en mis sienes
un camino de cenizas calientes
en su frustrado éxodo.
Un infierno increscendo entre mis pulmones
entró en mi a hurtadillas
y se pudre, lleno de ira
en la cárcel de mis costillas.