miércoles, 22 de septiembre de 2010

Fever.


En ese momento hay un pequeñísimo chasquido
Nace una estrella nueva en el cielo de madrugada,
Tú y yo compartimos un mismo núcleo
Sulfatados sobre las sábanas.
Sólo yo lo escucho y lo veo florecer
Siento una fiebre anidar en mí, 
Puedo oler tu sangre por debajo de tu piel
Y quiero hacerte daño, pero sólo para curarte después.

2 comentarios:

  1. Ay! El olor de la sangre! Ay!
    Ay! la sangre en las sabanas después de un mordisco!

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  2. Momentos enfebrecidos que se hacen eternos!!!

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