Se retorció a medio camino de mi garganta un beso untado en ansias. Correteó todo dispuesto desde mi estómago, aupándose con mis suspiros. Flotó.
Pero tragué tan fuerte que me lo he comido y dirás, "no quieres", y lo peor será que ¡tendrás razón!
Disparates de todos los colores y tamaños han desfilado por mi cabeza en cuestión de segundos mientras hacíamos ese trueque de miradas. Y tus besos subían, cantando, hasta tu boca, como si entre las mariposas de tu barriga y los jilgueros de tu garganta hubiese un tobogán invertido. Y te diré "no lo entiendes", y lo peor será que ¡tendré razón!
Y la pausa será tan larga que la misma muerte se llevará los restos de fresa y nata de nuestras comisuras.
Las moscas revolotearán al rededor de nuestros hediondos sentimientos, y las arañas tejerán sus telas entre nuestros dedos parados, esqueléticos. No los entrelazaré con los tuyos y dirás, "morimos", y lo peor será que es lo que debe ser.
te he encontrado de casualidad... Me ha gustado tu blog..
ResponderEliminarBeso.
Los disparates, mejor en colores!!!
ResponderEliminarVamos, que no hay beso.
ResponderEliminar...cachis!
Encantador blog el tuyo, un placer haberme pasado por tu espacio.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.